Probablemente lleves ya un tiempo siendo un profesional de tu sector. Tienes una formación muy completa, años de experiencia y los pacientes que has tratado están muy contentos contigo.
Aún así tu negocio no termina de arrancar.
Hoy vengo a hablarte de los 8 errores que cometen los profesionales sanitarios a la hora promocionar su consulta privada.
1. No te especializas
No te especializas en un campo de tu sector y por lo tanto no te posicionas. Si intentas ser el profesional que trata todo tipo de problemas no conseguirás diferenciarte de tu competencia. Será muy difícil que te recuerden o que la gente recurra a ti por un problema específico.
¿Por qué te iban a elegir a ti con respecto al resto de profesionales que probablemente conocen?
Ventajas de especializarte
1- Ahorras tiempo: Al saber con profundidad sobre un tema, te llevará menos tiempo tratar a esos pacientes y ofrecerás servicios más avanzados. Además tus tareas de marketing se verán reducidas al no necesitar estar en todos lados o escribir en tu blog sobre todo.
2- Si te especializas te diferencias y tienes menos competidores: en el ámbito del sector sanitario la competencia es feroz. Cuanto más especializado estés más te diferenciarás de tu competencia.
3- Podrás ofrecer tus servicios a mayor precio: cuantos más campos intentes abarcar, menos tiempo podrás dedicar a dominarlos y tus servicios serán más básicos. Si lo que ofreces es muy básico, tu tarifa será baja.
Si eres capaz de resolver problemas complicados, tus precios podrán ser elevados. Además, tus pacientes estarán dispuestos a pagarlo ya que te ven como un especialista en ese ámbito.
Quiero que cojas papel y boli y empieces a meditar sobre el tipo de paciente que te llena el corazón, el espíritu y el bolsillo.
Por ejemplo, si eres dermatólogo puede que te interese trabajar casos de alopecia juvenil.
O si eres fisioterapeuta quizá te interese tratar solamente deportistas.
2. No cuentas lo que haces
Seguramente tu entorno más cercano no tiene muy claro a qué te dedicas.
Si las personas que te rodean no saben a qué te dedicas o a quién puedes ayudar, estarás perdiendo multitud de oportunidades de recomendaciones que puedes tener.
Empieza haciendo contactos como toda la vida. Toma un café con gente o haz una estrategia de boca a boca. La cosa es empezar. De esta manera vas a atraer un gran número de clientes potenciales porque van a entender lo que haces.
Por ello te animo a que esta semana le cuentes a 10 personas de tu entorno lo que haces y cómo puedes ayudar a tus potenciales pacientes.
3. Diseñar una web pensada en ti y no en tus pacientes
Tienes que recordar que tu web está hecha para tus clientes. Es por ello que tu web tiene que ser fácil de usar y sencilla. Además deberá seguir una estructura específica para que convierta tus visitas en potenciales pacientes.
Ten en cuenta que tu web será tu principal activo digital para captar nuevos clientes, por lo que deberás prestarle especial atención.
4. No utilizas técnicas de copywriting
Copy… ¿qué?
¿Copyright? ¿Eso de los derechos?
No.
El copywriting es el conjunto de técnicas usadas para escribir textos que estimulan en los lectores la decisión de realizar una acción, como comprar o pedir cita.
En tu página web, en tus anuncios y en tus correos necesitas palabras que expresen justo lo que tus lectores necesitan. Necesitas textos que muestren exactamente el valor y los beneficios de contratar tus servicios.
Si lo haces de esta manera, conseguirás vender más.
5. No contar con un blog en tu web
Escribir en un blog es la mejor estrategia para conseguir visitas de forma orgánica a través de Google. Si escribes artículos interesantes para tus pacientes, te encontrarán más fácilmente y te posicionarás como experto.
Al escribir posts en tu blog, estas hablando con tus futuros pacientes y les ofreces los mejores consejos de salud para ganar su confianza.
6. No te atreves a vender
Te sientes incómodo vendiendo. Puede que sientas el famoso síndrome del impostor.
Piensas que quién eres tu para posicionarte como experto o para pedir unas tarifas más altas si todavía te quedan muchas cosas pendientes.
Déjame contarte un secreto:
Vender no es algo malo. Cuando vendes ofreces tu ayuda profesional a otras personas para solucionar sus problemas.
Gracias a tus años de experiencia, a tu formación y las herramientas que has adquirido, tienes la capacidad de solucionar eficientemente los problemas de tus pacientes y llevar a cabo un cambio en su vida.
Y por supuesto siempre puedes mejorar y te quedan muchas cosas por aprender. Pero esto es algo que vas a trabajar a lo largo de tu vida.
Puede que el proceso de venta te genere miedo al rechazo o miedo al fracaso. Si afrontas este miedo podrás crecer profesionalmente, aumentar tu facturación y adquirirás habilidades personales muy útiles.
Empieza como te he dicho contándoles a tu entorno qué haces y si conocen a alguien que necesite tu ayuda. Es un primer paso para quitarte ese miedo a vender.
Y recuerda: vender no es malo. Es ofrecer tu ayuda para cambiar la vida de las personas.
7. No construyes una base de datos de potenciales pacientes
Este es un error común que comenten la mayoría de las webs del sector sanitario.
Cuando un usuario accede a tu web, lo más probable es se vaya de tu sitio y se pierda dentro de la variada oferta que ofrecen otras webs.
Para poder comunicarte con él y que reciba información de tus servicios deberás utilizar un formulario de suscripción. Hay disponibles multitud de herramientas de email marketing que puedes usar y conectarlas a tu web como Benchmark o Active Campaign.
Gracias a una buena estrategia de email marketing conseguirás mantener el contacto con los visitantes de tu web, ganarte su confianza y convertirlos en nuevos pacientes.
8. Tu negocio te esclaviza
Puede que estés trabajando mil horas en tu consulta o clínica. No te puedes permitir estar un mes sin cobrar o ponerte malo.
Si tu problema no es que te falten clientes sino que te falta tiempo deberás plantearte los siguientes puntos en tu negocio:
- No estás vendiendo al cliente adecuado. Puede que estés ofreciendo tus servicios a clientes tóxicos que te pagan poco o nada y te exigen demasiado.
- Tus precios son muy bajos. Puede que los servicios que estés dando tienen mucho más valor que el precio que estás pidiendo. Por eso, llega un momento en que esos servicios no te compensan económicamente.
- No ofreces servicios online. Ofrecer sesiones online puede proporcionarte flexibilidad y ahorro de tiempo.
- No tienes productos que se puedan escalar. Estos productos te permiten ganar dinero sin invertir más tiempo. Por ejemplo los cursos online, ebooks y materiales que puedes vender a través de tu web.
9. No contar con una estrategia en redes sociales
Por más ganas que quieras empezar a mover tu marca en redes sociales, lo primero es desarrollar con una estrategia de social media.
Si no cuentas con una estrategia, nunca podrás llevar un mensaje claro a tus potenciales pacientes ni atinar con la audiencia concreta a la que te diriges.
Otro error muy común es crear un perfil en todas las paltaformas existentes. Esto es algo insostenible a largo plazo y te llevará mucho tiempo. Debes elegir aquellas plataformas en las que está el público al que te diriges.
Estos son los 8 puntos más habituales que te impedirán captar pacientes de forma regular.
Mi intención es poder enseñarte lo que puedes hacer para avanzar en tu proyecto y llegar a muchísima más gente.
Te animo a poner un comentario sobre qué errores estás cometiendo actualmente en tu consulta.